¡¡El nuevo reto viral peligrosos de comer cápsulas de detergente!!

¡¡El nuevo reto viral peligrosos de comer cápsulas de detergente!!

Está circulando por las redes sociales un nuevo reto viral estúpido y peligroso que pone en riesgo la salud de los adolescentes que lo llevan a cabo. El desafío se llama "Tide Pod Challenge" y consiste en comer cápsulas de detergente líquido, una práctica que puede causar envenenamiento por las sustancias tóxicas que contiene. 

El Tide Pod Challenge pasa a formar parte de una larga lista de retos virales absurdos y peligrosos para la salud. Entre los más populares encontramos The Fire Challenge, en el que los participantes se prendían fuego; la moda del SunBurnArt, que promovía la creación de quemaduras solares de diseño; el Turkey Slurpee, que consistía en aspirar una loncha de pavo; o el reto de canela, que llevó a urgencias a más de 200 adolescentes.

Al igual que los ejemplos anteriores, la nueva moda viral de comer cápsulas de detergente puede tener consecuencias muy graves. El líquido que contienen incluye etanol, peróxido de hidrógeno y polímeros, una mezcla altamente tóxica para el organismo en caso de ser ingerida, y requiere un lavado de estómago.

Según ha declarado en el USA Today el Dr. Alfred Aleaguas Jr., director gerente del Florida Poison Information Centre (Estados Unidos), llevar a cabo este estúpido reto viral puede causar diarrea y vómitos, en algunos casos el detergente podría llegar a los pulmones y producir dificultades para respirar, o incluso provocar una situación de "amenaza para la vida".

Ann Marie Buerkle, presidenta de la Comisión de Seguridad de Productos para el Consumidor de Estados Unidos, está de acuerdo con el Dr. Aleaguas y asegura que ingerir detergente conlleva un riesgo mortal.

El Tide Pod Challenge se empezó a poner de moda entre los adolescentes en algún momento de 2017. El año pasado, la Asociación de Centros de Control de Envenenamientos de Estados Unidos registró 220 casos de ingestión de detergente en adolescentes, el 25% de ellos intencionados. En lo que llevamos de 2018 ya se han reportado 37 nuevos casos en el país americano, la mitad de ellos voluntarios.

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